OFRENDAS:

Por otra parte, se practica la ofrenda de objetos precioso
o motivada, que eran escondidos como un tesoro. El sacerdote saliente, debía efectivamente
demostrar que no se llevaba nada y que mantenía sus cuentas. A veces las ciudades rivalizaban entre ellas
para ofrecer el tesoro más lujoso. La costumbre concierne principalmente a las
curaciones atribuidas a Asclepio; se le ofrece generalmente una ofrenda
representando el miembro curado. Los atletas, por otra parte, agradecían a los
dioses su destino con una estatua de ellos mismos, en caso de victoria, obviamente en los
juegos.
SACRIFICIOS:


Las Panateneas en Atenas y las Jacintias en Esparta daban lugar a la matanza de un gran número de bueyes, con los que se alimentaba al conjunto de los ciudadanos que participaban en la fiesta.
Esta participación en el sacrificio, además de una ocasión para comer carne, es la manera de volver a actualizar el pacto que une a la ciudad con sus dioses y que garantiza el orden y la prosperidad.
PARA QUE SE
REALIZABAN:
Creyeron que
podían aplacar a las divinidades y evitar sus castigos con oraciones y
ofrendas, con votos y sacrificios. Si el olor de la víctima quemada era un
perfume grato a
la divinidad, el valor de lo inmolado ya aludía al arrepentimiento y al
sacrificio del pecador.
Para solicitar algún don o bien para conjurar los
peligros, enfermedades y tormentas.
A QUIEN SE REALIZABAN:
EL culto privado se realizaba Zeus y Hesta, y el culto público se realizaba a los dioses de cada ciudad.
Normalmente, se realizaban en el templo de Apolo, Artemisa o Asclepio, pero también se podían hace en todos los templos.
Bastet, Apolo, Marduk y Esculapio.
Está bastante bien, sobre todo porque habéis contestado con corrección a lo que se pedía y con vuestro estilo. No obstante, hubiera estado bien algo más de información.
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